Una pareja detrás de la cámara y al lado de cada historia que merece ser contada.
Nos casamos hace siete años, así que sabemos lo que se siente en un día así. Desde entonces, no solo hemos formado un equipo sólido como pareja, sino también como profesionales que comparten una misma visión: narrar bodas con una mirada sincera, elegante y atemporal.
Trabajamos juntos, con el mismo estilo, la misma sensibilidad y una complicidad que se nota en cada imagen. Nos inspira lo honesto, lo natural, lo que no necesita artificios. Creemos en los gestos que no se fuerzan, en las miradas que no se ensayan.
Nuestro estilo es documental, con un enfoque editorial. Nos gusta observar con calma, pasar desapercibidos, capturar sin interrumpir. Lo bello sucede cuando nadie lo fuerza.
Nos mueve el arte, la música, los viajes y la belleza de lo sencillo. Todo eso se cuela —sin buscarlo— en cada fotografía y cada vídeo que entregamos.
En MOSU acompañamos a parejas que cuidan los detalles, que entienden su boda como algo más que una fiesta. Como un capítulo irrepetible que merece ser contado con alma y delicadeza.
Y ahí estamos nosotros: cerca, discretos, atentos.
Para que no tengáis que preocuparos de nada.
Para que podáis vivirlo todo.
Y revivirlo para siempre.
Nos mueve el arte, la música, los viajes y la belleza de lo sencillo. Todo eso se cuela —sin buscarlo— en cada fotografía y cada vídeo que entregamos.
En MOSU acompañamos a parejas que cuidan los detalles, que entienden su boda como algo más que una fiesta. Como un capítulo irrepetible que merece ser contado con alma y delicadeza.
Y ahí estamos nosotros: cerca, discretos, atentos.
Para que no tengáis que preocuparos de nada.
Para que podáis vivirlo todo.
Y revivirlo para siempre.
